PROBLEMÁTICA DE UN ALUMNO DIS
(P) = Profesora; (O) = Orientadora; (N) = Narrador/a; (F) = Familia (padre y madre en conjunto); (Pa) = Padre; (Ma) = Madre.
P: Hola, mira tengo un niño en clase que tiene dificultades, no sabe leer bien, los números sólo los conoce hasta el diez, su escritura es ilegible, es un niño muy inquieto y no va al nivel de los demás compañeros.
O: Toma este papel, rellénalo y pon tu demanda. Además necesito que adquieras un compromiso ya que si yo te hago el diagnóstico yo necesito que te comprometas a seguir las indicaciones porque si no, ¿para qué te hago el diagnóstico?
P: Sí, no te preocupes, mañana sin falta te lo doy.
N: La orientadora sin falta habla con otros maestros para ver qué opinan del niño.
Al día siguiente la profesora le da la demanda del diagnóstico y quedan en llevarse al niño después del recreo. Después del recreo la profesora llega a la clase.
O: (Pon, pon, pon).
(Abre la puerta).
O: Hola Margarita, vengo a llevarme a Pedro.
P: Vale.
N: La profesora se lleva a Pedro a su despacho y le pasa diferentes tipos de pruebas. Tras terminar las mismas, se pone a analizarlas y realiza el diagnóstico, pero necesita entrevistarse con los padres para obtener más información, aunque aún no han podido citarse debido a que los padres están separados y no se ponen de acuerdo.
La orientadora llega a la conclusión de que el niño tiene una deficiencia y lo detecta como alumno DIS. Es por ello que prepara un informe con una serie de recomendaciones y orientaciones sobre lo que tiene que hacer la profesora.
P: (Pon, pon, pon). Hola Lourdes, ¿sabes ya lo que tiene el niño?
O: Sí, aquí tienes el informe psicopedagógico. El niño tiene una pequeña discapacidad.
N: Entonces la tutora y la orientadora deciden hablar con los padres del niño para informarles de los resultados del diagnóstico.
F: (Pon, pon, pon).
P: Adelante.
F: Buenas tardes.
P: Os he citado para informarles sobre los resultados de las pruebas que la orientadora le ha realizado a vuestro hijo. Os presento a la orientadora del centro, ella es Lourdes.
N: Con sutileza y delicadeza, la orientadora le comunica a los padres que su hijo tiene una pequeña discapacidad.
O: Por el resultado que vuestro hijo ha obtenido puedo afirmar que presenta una pequeña discapacidad. Por este motivo vuestro hijo necesita la ayuda de un psicólogo, para que le ayude a superar vuestra separación y la logopeda porque presenta problemas en el habla.
Pa: Mi hijo no necesita ningún logopeda porque no tiene ningún problema en el habla.
Ma: Si es ella la profesional, sabrá lo que le pasa y lo que necesita nuestro hijo mejor que tú…
Pa: Tú haz lo que quieras, pero yo no voy a firmar para que el niño vaya a ningún logopeda.
Ma: Tú eres un egoísta e insensato y no piensas en lo que verdaderamente necesita nuestro hijo, pero tranquilo que todo esto lo llevaré a los tribunales hasta sus últimas consecuencias, a ver quién gana.
Pa: A ver quién gana.
N: Transcurridas dos semanas le llega a la orientadora Lourdes una citación del juzgado, en la que se ruega que asista la misma al juicio. La orientadora decide entrevistarse antes con los padres para dejar algunos temas aclarados.
F: (Pon, pon, pon).
O: Adelante.
F: Hola.
O: Os he citado para que sepáis que me ha llegado una carta para que asista a vuestro juicio como testigo. Quiero que sepáis que yo no me voy a posicionar ni a favor ni en contra de ninguno de los dos, sólo voy a informar de lo que sé con certeza, el diagnóstico de vuestro hijo, ¿estamos de acuerdo?
Pa: ¿Ha terminado usted?
(Se levanta da un portazo y se va).
N: Una vez en el juicio, se declara la orientadora como neutra ante ambas partes, y su única función es informar sobre el diagnóstico que le hizo al niño y los recursos del que necesita para su propio desarrollo.
El juez se decanta a favor de la madre y se da por finalizado el conflicto.
Realizado por: Ascensión Amuedo Duque, Sandra María Rosado Muñoz y Alba Vico Bosch.